martes, 2 de febrero de 2010

Puzzle

No es la manera en la que sufrí. No lo es. Mi miedo no nace en el sufrimiento. Mi miedo nace en la felicidad. Aquella que nunca creí pudiera llegar a alcanzar. Mi miedo nace del recuerdo de lo que una vez fui. De sumar uno más uno y comprobar cómo las sinergias de las que tanto me hablaron en las clases de finanzas no sólo existen en operaciones corporativas, sino que se escapan de bloomberg y reuters para llegar a cada uno de nosotros. Así es, no tengo miedo de volver a pasar un tiempo en el infierno. No lo tengo. Porque si alguien me asegurara que puedo volver a estar en el cielo, aunque sea por un sólo minuto; lo aceptaría sin dudarlo.

Yo tengo miedo de no volver a sentir algo parecido. De seguir despertándome cada mañana con una pieza perdida; como un puzzle sin final.

Puede ser hermoso: el paisaje, los árboles, las flores...el color de cielo...has pasado horas y horas intentando colocar cada una de las fichas de tu caja de miles; haciendo el marco, llenando primero una esquina y luego la otra; haciendo montoncitos de colores; luego irías acabando tus fichas; haciendo un trabajo perfecto...casi perfecto...pues cuando acabaras faltaría una. Única. Pero imprescindible.

Y entonces, te volverías loca. Empezarías a levantar la caja, a moverla de un lado a otro como si por arte de magia fuera a aparecer. Pero no lo hace. Te agachas y te metes debajo de la mesa. Revisas por sitios por ni siquiera estuviste. Pero no está. No aparece. Y tu obra maestra está sin terminar. Completo incompleto como dice la canción.

Y piensas "ya aparecerá". Y miras ese hueco vacío. Y añoras esas curvas. Sueñas con que vuelva a estar entre tus manos. Intentas encajar otras, pero no vale; sobra o falta. Deseas...sentirte...completa.

Una entre un millón.

Una que llena cada una de las partes vacías de tu cuerpo, de tu vida, de tus sentimientos, de...ti misma.



"we fit together, like puzzle pieces. "