viernes, 23 de enero de 2009

Stop the fight!

Haciendo caso a mi querido amigo Phoenix, y a mi yo interno que grita en silencio en esta continua batalla que mantengo durante tantas noches, he tirado mi espada, mi escudo, mi armadura...todo está enterrado. Armisticio. He firmado la paz. En mi búsqueda he encontrado fuerzas renovadas, energías reforzadas.

Enriqueciendo mi alma sin esperar a que nadie me traiga flores.

Ya no quiero ahogar pensamientos, ni buscar esperanzas en un vaso vacío; no quiero silenciar mi mente, anestesiarla hasta caer tendida en la cama. Gastar mis botas de tanto bailar en un océano de ruido, humo y gente desconocida.

Quiero escuchar cómo llegan las olas a la orilla, esperarlas en silencio sentada en la arena, sintiendo la suave brisa del mar y el cantar de los pájaros. Quiero ver cómo pasan las horas y no paso frío. Y entonces, ver amanecer con una sonrisa en la cara, y tenderme en la toalla a disfrutar de los primeros rayos de sol, calentarme, meterme en el agua y sentir cuan viva soy/estoy.

3 comentarios:

Estoicolgado dijo...

parece buena idea, porque no deberías dejar de estarlo!
ojalá se enriquezca también con flores, inesperadas

Phoenix dijo...

Me alegro de haber sido de ayuda ;-)

Un beso fuerte

José Luis Labad dijo...

Hoy no gritas en silencio, me gustas mucho más ahora, cuando oigo tu grito de esperanza.
Felicidades por encontrarte bien, así nosotros también lo estaremos, celebrando tu regreso.
Lo Imborrable