miércoles, 30 de diciembre de 2009

Año nuevo, vida nueva

Es el final. O el principio. Todo depende desde dónde se mire.

Yo me cansé de mirar al pasado, de vivir de recuerdos, de correr entre sombras, de olores vacíos, de historias borrosas. Digamos que me cansé de sufrir.

Sufrí. Sufrí tanto. Cada segundo de cada uno de todos los días pasados a los que mi memoria reciente alcanza.

Me aferré a tu cuerpo, a tus labios, a tus sonrisas, a tu mirada, a tus palabras... Pensé que volverías. Me lo imaginé mil millones de veces; esperanzada. Pero hace poco me di cuenta de que ni siquiera fuiste mio. No lo fuiste nunca. Y es triste, sí; pero es lo mejor que me ha pasado en la vida. Fui feliz, ¿sabes? por primera y única vez me sentí completamente feliz; llena; desbordante de alegría; viviendo mis sueños; haciendo planes; dibujando un futuro maravilloso en el que tú y yo no dejábamos de abrazarnos. Fue maravilloso.

Durante todo este tiempo no he dejado que nadie se acercara. He dejado intacto ese mundo; he cerrado los ojos y el corazón; he negado el amor de otras personas; he apartado de mi lado todo atisbo de alegría; he intentado lamer mis heridas, de curarlas yo sola; he querido encontrarte de nuevo y he soñado contigo; he esperado tu regreso...en vano.

Daba mi vida sólo por un día más a tu lado. Fui ciega. Fui sorda. No quise ver la fuerza de los (tus) actos. No quise darme cuenta de que realmente era un juego; uno más; pero no para mi,yo no era una niña. Has sido lo mejor que me ha dado esta vida. Y no me arrepiento. No sería justo hacerlo.

No lo hago. Nunca lo haré. Y tengo motivos para odiarte. Y tengo motivos para expulsarte de mis recuerdos. Para encerrarte en lo más profundo de mi. Pero no lo haré. No lo haré por lo que fuimos. No lo haré porque tuve los sentimientos más puros que jamás pude creer. No lo haré porque durante ese año y medio fui real. Porque me sentí afortunada. Porque no hubo nadie en la tierra más dichosa que yo. Porque no se puede amar a nadie más de lo que yo lo hice contigo.

Pero ya es hora de volver a ser; es hora de nacer; de crecer; de vivir; de compartir; de gritar; de reaccionar; de ver; de tocar; de soñar; de ilusionar; de aprender; de conocer; de abrazar; de querer; de mimar; de besar; de sentir; de convivir;...de amar (y ser correspondida).

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Castillos de Cartón

No podía soportar aquel recuerdo, eso fue lo que pasó después, y que el horizonte se estrechó, y el cielo se volvió un techo cuadrado, mi vida una sucesión de imágenes desenfocadas y torpes, como las estampas de un almanaque ilustrado por un mal pintor.

(...)

Era demasiado amor. Demasiado grande, demasiado complicado, demasiado confuso, y arriesgado, y fecundo, y doloroso. Tanto como yo podía dar, más del que me convenía. Por eso se rompió. No se agotó, no se acabó, no se murió, sólo se rompió, se vino abajo como una torre demasiado alta, como una apuesta demasiado alta, como una esperanza demasiado alta.

(...)

Bueno, nunca os lo he contado, pero a mí me cuesta mucho trabajo vivir. Siempre, desde siempre. Es algo difícil de explicar, como a vosotros no os pasa seguramente no lo entenderéis, pero yo siempr ehe sentido que vivía dentro de un túnel, a oscuras, aparte, lejos de todo. Veía luces al principio y al final, sabía que existía el mundo, más gente, el sol, la luz, las calles, mis padres, todo eso, pero no podía salir, ni siquiera quería salir de allí, era demasiado esfuerzo. Nunca os lo he contado, pero a mí me da todo mucha pereza, despertarme por la mañana, levantarme de la cama, vestirme, desayunar, todo eso me cansa mucho, estoy muy cansado antes de hacer nada, tengo que obligarme a hacer las cosas que los demás hacen sin darse cuenta. y a medida que consigo hacerlas, me siento menos cansado, y no más, es muy raro...(...) Yo no tengo ganas de nada, o mejor dicho, no tenía ganas de nada hasta que os conocí.

(...)

Yo nunca había sido muy feliz, esa es la verdad. Cuando empezamos con esto, descubrí lo que era estar bien, estar contento. Y no puedo renunciar a eso, no quiero, no quiero volver al túnel, volver a vivir en un túnel, estoy dispuesto a hacer lo que sea...Ésa es la razón de que aguante tanto, de que haya aguantado cosas con las que otros no podrían, eso lo habréis pensado, ¿no?, seguro que lo habéis pensado...

(...)

Estaba segura de que un buen día volvería, de que antes o después tendría que volver, porque no podía estar tan ciego, no podía haberse vuelto tan estúpido, ni tan soberbio, no tan cruel. Esperaba a Jaime, pero los días pasaban, pasaban los meses y las estaciones, y mi vida estaba suspendida de un hilo ffágil, una certeza que se iba convirtiendo en un azar, un azar que empañaba los cielos y emborronaba mi mirada, los objetos, las siluetas, las paredes de cualquier lugar donde yo estuviera.

(...)

Debería odiarle y sin embargo le amaba. No sabía por qué, pero sabía que era amor lo que sentía al pensar en él (...) No lo entendía pero le amaba, con el amor intenso aún de los tiempos peores, y debería haberle odiado, pero no podía, nunca podría odiarle.

(...)

Había sido demasiado amor, tanto como el que yo podía dar, más del que me convenía.
Fue demasiado amor. Y luego,nada.


ALMUDENA GRANDES

jueves, 5 de noviembre de 2009

Probablemente...la mejor película del mundo

"Capaces de todo...excepto de reconocer que se quieren"

martes, 27 de octubre de 2009

Miedo

Tengo miedo.

Un día dije que no dejaría que el mundo me cambiara, que pretendía yo cambiar al mundo. Pero el mundo terminó ganando. No me cuesta reconocerlo. Tras la derrota no he podido ser yo misma.

Hace unos días hablaba con una amiga precisamente de esto. De amor y desamor. De perder y de ganar. De luchar y de sufrir. De la distancia y del olvido. Muchas cosas simplemente las pensé y no las compartí con ella. Pero si hay algo que se grabó en mi de sus palabras es que no puedo seguir viviendo con miedo.

Tengo miedo. Mucho miedo.

El mismo que ha conseguido paralizarme durante este último año. Miedo de encontrarte, miedo de no volver a sentir, miedo de seguir perdida, miedo a estar sola pero mucho más a estar con alguien, miedo a reír, miedo a ser capaz, miedo a hacer locuras, miedo a compartir,...miedo a ser feliz.

Un día, sin saber cómo ni porqué algo maravilloso ocurre en tu vida y te das cuenta de que cada uno de los días anteriores, todos aquellos en los que te levantabas sin darle sentido a tus actos; de pronto, cobran un color diferente.

Por primera vez una persona consigue llenarte, consigue hacerte inmensamente feliz.

Por una vez, dejas de ser esa persona fría y distante, y te muestras tal y como eres. Sientes por dentro que es él. Y sientes miedo. Pero esta vez, tú ganas. Y, pese a que una pequeña vocecita interior te grita que tengas cuidado. La silencias. Y empiezas a vivir una vida que jamás pensaste te pudiera tocar a ti. Vives cada día intensamente, te permites hacer planes de futuro e incluso imaginas una vida común. No quieres absolutamente nada más, no añoras absolutamente nada. Tan sólo deseas que los días sean más largos porque no quieres separarte un segundo de él; ni despierta ni dormida. Por eso, cuando duermes junto a él no puedes dejar de abrazarlo y de besarlo en sueños y cuándo éste te gana y vuelves a recuperar la consciencia lo único que haces es abrazarlo más fuerte, para que sepa que estás junto a él y que nunca vas a irte de su lado, que te hace la persona más feliz del mundo y que serías capaz de cualquier cosa por él. Pero no se lo dices, porque crees que él te siente, de la misma manera que tú lo sientes a él. En silencio.

Pero un día, llega todo lo malo. Lo blanco se vuelve negro. Las luces se apagan. La música se convierte en un ruido ensordecedor. La risa se vuelve agua salada. Se ha ido. La magia. Se ha ido. No hay más nosotros. Ni siquiera quedan ganas de un yo. Se acabó.

Y te encuentras vacía, más aún que en todas aquellas mañanas, antes de que él las cambiara. Estás perdida. Caminas sin rumbo. Cambias de vida. Conoces a gente, a mucha gente. Tampoco funciona. Te quedas en casa. Estudias. Lees. Empiezas a trabajar. Ya no te gusta salir de fiesta. Dejas de ir al cine porque ya no hay palabras mágicas en tu piel. Evitas tus sitios preferidos porque eran plurales. También ver la tv, no tienes tu sofá preferido. Caminas en una ciudad diferente pero sólo ves la cara de una persona en todas las que se te cruzan y vuelves a tu cama, que es el único sitio en el que has conseguido sentirte segura. Alguien apaga la banda sonora de tu vida, pero tampoco te importa; necesitas silencio. Haces deporte. Mucho deporte. Te sientes aliviada. Has empezado a dormir por las noches. Y no todas te duermes con la almohada mojada. Paso a paso. Rutina.

No puedes volver. No tienes fuerzas. No es el lugar que recordabas. Te sientes extraña. Cuando lo haces vuelves a caer, a tu almohada mojada y a tus noches en vela. Sientes miedo. No puedes salir a la calle. Mucho miedo. Tiemblas al pasear por tu ciudad. Ya no es la misma. Tú tampoco. Oyes música en tu ventana. Y por primera vez en mucho tiempo sacas una leve sonrisa con polvo del pasado. No duermes. Te haces mil y una preguntas. No consigues responderlas. Sientes frío.

Regresas a tu rutina diaria. Corres, estudias, trabajas, corres, lees, corres, duermes. Y pasan los días, las semanas, los meses.

Aún sigues sin poder volver. Y todas las personas en tu otra vida se preguntan por qué. Todas...menos una. Y lloras. En la distancia. Pero no. En el olvido. No.

Y sientes miedo.

Y te preguntas cuándo. Y te preguntas por qué. Y te preguntas quién. Y te preguntas dónde.

Y no tienes respuesta. Y sientes miedo.

domingo, 11 de octubre de 2009

Dreams

Sigo fantaseanso con que un día vengas a buscarme, me mires dulcemente a los ojos (de esa forma que tan sólo sabes hacer tú) y digas sin miedo, alto y claro: "estoy totalmente enamorado de ti, en todo este tiempo no he logrado olvidarte; lo sé, es una locura, pero no puedo perder un segundo más sin tenerte a mi lado, ¿serías capaz de pasar el resto de tu vida conmigo?"

Y yo, aún sin creer que estuviera ocurriendo, miraría a los tuyos y te sonreiría con ellos (de esa forma que sólo sé hacer contigo), y sin necesidad de palabras sería tuya por siempre.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Decepcionada

Hace meses que las palabras decidieron dejar de aparecer entre mis dedos. He intentado buscar una razón lógica que explique tal inusual fenómeno. A mi siempre me ha gustado escribir; más que eso, me ha gustado la sensación de desahogo que produce ir sacando de mi cuerpo todas las cosas que tanto me atormentan (lentamente), disfrutando de cada uno de los segundos que me llevan escribir estas letras. Sin embargo, hace ya tiempo que ha dejado de ser así. Ya ni me molesto en entrar en este mundo de paz y tranquilidad, de sosiego y esperanza; simplemente doy vueltas en la cama hasta que el sueño consigue vencer mis miedos.

Hoy no he podido aguantar más. He vuelto a hacerlo. He vuelto a dejar que mi corazón hable y mi mente calle; tan sólo unos microsegundos. pero suficientes como para llevarme de cabeza a ese oscuro lugar del que pensé ya comenzaba a salir.

No es justo. Es como si cuando consiguiera divisar el borde con mis ensangrentadas manos alguien estuviera esperándome, sigiloso, en alerta, para entonces pisar con todas sus fuerzas mis dedos, hasta notar cómo se van desprediendo uno por uno, no sin antes luchar por aferrarse a la costosa cima que pensaba había logrado alcanzar;y entonces, no es que caiga lentamente mientras me golpeo contra las paredes y mi cuerpo se va resintiendo en la caída, magullado y dolorido; sino que caigo directamente al fondo del agujero, donde permanezco inconsciente, en la más profunda soledad y oscuridad, tratando de respirar ese viciado aire que ya comienza a saber a rancio y a desprender un hedor que ha ido aferrándose a mis pulmones y haciéndose cada vez más insoportable, invivible. Me siento ahogada, poco a poco, en mis propias decepciones (recurrentes, resurgentes, reiterativas, reinventadas, represivas, retentivas...pero más reales que nunca).

Y en esta batalla que tantos días dura (por no hablar de meses,y muchos) un buen día ya es toda una victoria para celebrar.

lunes, 31 de agosto de 2009

Hoy

Simplemente instantes. Momentos de este día. Que quisiera borrar de mi mente. Tu último suspiro. Tu respiración apagándose poco a poco mientras yo te miraba con la impotencia agarrotándome todos los músculos del cuerpo. Inerte. La opresión de mi pecho al saber que ya nunca más estarías conmigo. Mis rodillas temblando mientras salía de aquella maldita habitación.

Simplemente instantes. Momentos de este (otro) día. Que quisiera conservar intactos en mi mente. Tú. Mi aliento. Mi aire. Mi movimiento. Mi corazón. Mis fuerzas para seguir adelante. Mi. Tú y yo. Nosotros.

Simplemente instantes por los que vale la pena vivir.

Un día triste;un día feliz. Los dos en grado máximo, multiplicados hasta el infinito y elevados a la enésima potencia.

Hoy otro día, debatiéndome entre la tristeza y la alegría.



*Tu recuerdo vive en mi, no te olvidaré*

domingo, 2 de agosto de 2009

Después de un tiempo, uno aprende la sutil diferencia entre sostener una mano y encadenar un alma; y uno aprende que el amor no significa acostarse y que una compañía no significa seguridad, y uno empieza a aprender...
Que los besos no son contratos y los regalos no son promesas, y uno empieza a aceptar sus derrotas con la cabeza alta y los ojos abiertos, y uno aprende a construir todos sus caminos en el hoy, porque el terreno de mañana es demasiado inseguro para planes... y los futuros tienen una forma de caerse en la mitad.
Y después de un tiempo uno aprende que si es demasiado, hasta el calor del sol quema. Así que uno planta su propio jardín y decora su propia alma, en lugar de esperar a que alguien le traiga flores.
Y uno aprende que realmente puede aguantar, que uno realmente es fuerte, que uno realmente vale, y uno aprende y aprende... y con cada día uno aprende.
Con el tiempo aprendes que estar con alguien porque te ofrece un buen futuro significa que tarde o temprano querrás volver a tu pasado. Con el tiempo comprendes que sólo quien es capaz de amarte con tus defectos, sin pretender cambiarte, puede brindarte toda la felicidad que deseas.
Con el tiempo te das cuenta de que si estás al lado de esa persona sólo por acompañar tu soledad, irremediablemente acabarás deseando no volver a verla.
Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos tarde o temprano se verá rodeado sólo de amistades falsas.
Con el tiempo aprendes que las palabras dichas en un momento de ira pueden seguir lastimando a quien heriste, durante toda la vida.
Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es sólo de almas grandes.
Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a ser igual.
Con el tiempo te das cuenta de que aunque seas feliz con tus amigos, algún día llorarás por aquellos que dejaste ir.
Con el tiempo te das cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible.
"uno aprende"...y uno aprende y aprende... con cada día uno aprende".

J. BORGES

viernes, 31 de julio de 2009

Buscando al Dr Howard Mierzwiak

viernes, 24 de julio de 2009

¿Qué fue de mi?
¿Dónde se quedo mi alma abandonando a este cuerpo tan vacío?

jueves, 23 de julio de 2009

Y acabar conviertiéndome...

...en lo que siempre he odiado.

Ese es mi miedo. Hoy.

Con cada golpe que recibo más me encierro en mi misma. Más fría me siento, impidiéndo a cualquier persona que se acerque demasiado a mi, no vaya a darse cuenta del gran vacío que tanto me pesa.

Las derrotas nos hacen ver cuan débiles somos.

Perdí. Me caí, me levanté y volví a caer y levantarme mil y una más. Ahora que por fin he conseguido empezar a andar siento que cada tropiezo se llevó una parte de lo que fui. El tiempo es el mejor remedio (dicen). Miro mi cuerpo y cuento mis cicatrices, aún hay muchas que sangran, pero otras, por suerte, empiezan a cicatrizar. Sé que no será fácil. Sé que es tan sólo un principio, un pequeño paso en este gran camino que espera. Y para el que voy acumulando fuerzas.

Quizás estos pasos me lleven a lo que un día fui; ojalá me conviertan en una mejor persona. Por ahora, me conformo con ir quitando lastre y con soñar con que algún día vuelvan a crecer las alas que tenía escondidas debajo de mi camiseta, y entonces, pueda emprender vuelo. Sola. Acompañada. Feliz. Completa.

viernes, 10 de julio de 2009

Lostie

Piérdete conmigo en la oscuridad de esta noche
Piérdete entre mi ropa y mi piel
Piérdete con tus manos por mi cuerpo
Piérdete y desnúdame otra vez

Piérdete

Piérdete un poquito más
Piérdete lento y suave

Piérdete
Piérdeme
Piérdenos gritando



Grita y despiértame
Despiértate y búscame
Búscame y encuéntrame
Buscándote

Y vuelve a perderte en mi
una y otra vez
esta y otra noche
y,
cierra la ventana
ya no hay más valientes
que quiera en mi cama

Ooppps, you did it again!

Mucho tiempo ha pasado y yo aún siento que falta un trocito de mi; esa pieza de puzzle que un día tuve y al poco perdí. Una simple pieza que, nunca mejor dicho, es un rompecabezas (la mia). No vuelvo a ser yo. No logro ser feliz. Y ya, como dice la canción, "es un derroche de masoquismo".

Quiero acostarme cada noche doliéndome la cara de tanto sonreír. Quiero despertarme tranquila y feliz. Quiero tener ganas de contagiar mi sonrisa a cada una de las personas con las que me cruce por la calle. Quiero gritarle al mundo que he vuelto a ser feliz.

Quiero, quiero...y no puedo.

Y si querer es poder, yo ya no sé qué más hace falta hacer.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Empty

Estás vacía. Te cuesta reconocerlo, llevas días y días y semanas y meses dándole vueltas a la misma idea. Estás vacía. No ya es el simple hecho de que te sientas vacía, condenada a pensar en esa parte que te falta. Te has ido vaciando poco a poco hasta quedar consumida en este mar de recuerdos, sonrisas que se empiezan a desvanecer a diario, fotos, libros, películas, sábanas...una enumeración infinita de ese tiempo que tanto añoras.


No queda nada (más) que dar. Simplemente te encuentras vagando por el mundo, arrastrando estos pies pesados por calles extrañas y repletas de desconocidos. Corres. Más rápido. Hasta quedar sin aliento; el aliento que antes te quitaban sus ojos.

Ya no te quitan nada; por no quitar, ni siquiera se te quita el miedo; ni esa mala cara que llevas puesta desde hace tanto. No te quitan las penas que se han ido aferrando a tu alma, que cada vez más oscura y solitaria.

Solitaria como te has convertido en este tiempo. Sin ganas de compartir tu tiempo con nadie; sin ganas de emplearlo en nada. Más que en correr, es lo único que te quita (ahora sí) esa angustia que llevas dentro.

Por unos minutos, una hora máxime al día, todo desaparece y tu mente se libera. No ves sonrisas, cosquillas, sudor, besos, abrazos que funden, escaleras voladoras, piel con chocolate...no ves nada porque se te nubla la vista y te tiemblan las piernas y, justo en ese instante, te permites el descaro de sonreír, una tibia sonrisa, casi imperceptible a la vista de las demás personas, pero que sientes muy dentro, muy tuya (muy mia).

domingo, 19 de abril de 2009

Cuélate en mis sueños esta noche.

Y por sueños puedes interpretar sábanas. Unas sábanas en las que taparnos para que no veamos salir el sol: donde jugar durante horas a hacernos cosquillas con los labios; donde leer palabras escritas con sudor y saliva; donde escuchar la melodía que dictan nuestros corazones.

Cuélate en mi cama, valiente.

Y déjame mirar cómo te duermes entre mis piernas y mis brazos. Déjame contar cada uno de los latidos de tu pecho. Déjame sentir tu respiración contra mi cuello. Déjame besar cada poro de tu piel. Déjame acariciar cada milímetro de tu cuerpo.

Cuélate en mi ropa.

Y quítamela poco a poco, y hazme gritar esta noche en la que me siento tan sola. Para que ese grito me despierte de pronto y por fin vea tu cara, y entre mis manos beba en tu boca. Y me abrigue en la noche tu cuerpo desnudo.


Cuélate.




Atrévete.








Sorpréndeme.

Siempre me pregunto que hubiera pasado si...

...Rachel se hubiera enamorado de Joey y no de Ross?
...Carrie se hubiera casado con Aidan y no con MrBig?
...Mer hubiera elegido a Finn y no a Derek?
...Allie se hubiera quedado con Lon Hammond y no con Noa?
...Sophie no hubiera sido capaz de decidirse por Julien?
...Sara Thomas no hubiera tenido la casualidad de reencontrarse con Jonathan Trager?
...Otto no hubiera sido valiente y hubiera saltado por la ventana de Anna?

...



Do you believe in...
Destiny?
True Love?
...

miércoles, 15 de abril de 2009

Asunción de ti


1

Quién hubiera creído que se hallaba
sola en el aire, oculta,
tu mirada.
Quién hubiera creído esa terrible
ocasión de nacer puesta al alcance
de mi suerte y mis ojos,
y que tú y yo iríamos, despojados
de todo bien, de todo mal, de todo,
a arrojarnos en el mismo silencio,
a inclinarnos sobre la misma fuente
para vernos y vernos
mutuamente espiados en el fondo,
temblando desde el agua,
descubriendo, pretendiendo alcanzar
quién eras tu detrás de esa cortina,
quién era yo detrás de mi.
Y todavía no hemos visto nada.
Espero que alguien venga, inexorable,
siempre temo y espero,
y acabe por nombrarnos en un signo,
por situarnos en alguna estación
por dejarnos allí, como dos gritos
de asombro.
Pero nunca será. Tú no eres ésa,
yo no soy ése, ésos, los que fuimos
antes de ser nosotros.

Eras sí pero ahora
suenas un poco a mí.
Era sí pero ahora
tengo un poco de ti.
No demasiado, solamente un toque,
acaso un leve rasgo familiar,
pero que fuerce a todos a abarcarnos
a ti y a mí cuando nos piensen solos.



2

Hemos llegado al crepúsculo neutro
donde el día y la noche se funden y se igualan.
Nadie podrá olvidar este descanso.
Pasa sobre mis párpados el cielo fácil
a dejarme los ojos vacíos de ciudad.
No pienses ahora en el tiempo de agujas,
en el tiempo de pobres desesperaciones.
Ahora sólo existe el anhelo desnudo,
el sol que se desprende de sus nubes de llanto,
tu rostro que se interna noche adentro
hasta sólo ser voz y rumor de sonrisa.


3

Puedes querer el alba
cuando ames.
Puedes
venir a reclamarte como eras.
He conservado intacto tu paisaje.
Lo dejaré en tus manos
cuando éstas lleguen, como siempre,
anunciándote,
Puedes
venir a reclamarte como eras.
Aunque ya no seas tú.
Aunque mi voz te espere
sola en su azar
quemando
y tu sueño sea eso y mucho más.
Puedes amar el alba
cuando quieras.
Mi soledad ha aprendido a ostentarte.
Esta noche, otra noche
tú estarás
y volverá a gemir el tiempo giratorio
y los labios dirán
esta paz ahora esta paz ahora.
Ahora puedes venir a reclamarte,
penetrar en tus sábanas de alegre angustia,
reconocer tu tibio corazón sin excusas,
los cuadros persuadidos,
saberte aquí.
Habrá para aprender otra piedad
y el momento del sueño y el amor
que aquí permanecieron.
Esta noche, otra noche
tú estarás,
tibia estarás al alcance de mis ojos,
lejos ya de la ausencia que no nos pertenece.
He coservado intacto tu paisaje
pero no sé hasta donde está intacto sin tí,
sin que tú le prometas horizontes de niebla,
sin que tú le reclames su ventana de arena.
Puedes querer el alba cuando ames.
Debes venir a reclamarte como eras.
Aunque ya no seas tú,
aunque contigo traigas
dolor y otros milagros.
Aunque seas otro rostro
de tu cielo hacia mí.


Mario Benedetti

sábado, 4 de abril de 2009

Se supone

http://www.youtube.com/watch?v=dmW1KBjiOyg

lunes, 30 de marzo de 2009

Insomnio (II)

Qué fácil sería. Hacer desaparecer todas esas "cosas" que nos quitan el sueño en un instante. Hacer que caigan en minúsculos polvitos hacia el suelo, como cuando eras pequeña y la profe te mandaba a borrar la pizarra y te levantabas tan contenta de la silla, por haber sido "la elegida" de entre todos tus compañerps. Dabas saltitos (en mi caso, grandes saltos) para intentar llegar a lo más alto. Y cuando terminabas te sacudías las manos y la camiseta y volvías a tu sitio con una gran sonrisa en la cara. Viendo como todas aquellas letras se suspendían aún unos segundos en la atmósfera de la clase antes de ser ganadas por la gravedad.

Qué fácil sería.

Pero a veces, como ocurría entonces, hay palabras que se quedaban escritas aún habiendo sido borradas con esmero; una y otra y otra vez; y hasta pasando un paño húmedo sobre ellas.

Incluso, cuando pensabas que ya habían desaparecido, una mañana los primeros rayos de sol que incidían sobre la superficie verde hacían resurgir esas letras. Nuevas. Viejas. De antes. De ahora. De siempre (¿o es por?)
¿Qué puede más el miedo o las ganas?

jueves, 26 de marzo de 2009

Cuando se va la luz, por suerte, siempre hay alguien que enciende una vela.

lunes, 2 de marzo de 2009

In-

-justo, ta.

(Del lat. iustus).
1. adj. Que obra según justicia y razón. U. t. c. s.
2. adj. Arreglado a justicia y razón.
3. adj. Que vive según la ley de Dios. U. t. c. s.
4. adj. Exacto, que no tiene en número, peso o medida ni más ni menos que lo que debe tener.
5. adj. Apretado o que ajusta bien con otra cosa.
6. adv. m. Justamente, debidamente, exactamente.
7. adv. m. Apretadamente, con estrechez.
Sin...

justicia

(Del lat. iustitĭa).
1. f. Una de las cuatro virtudes cardinales, que inclina a dar a cada uno lo que le corresponde o pertenece.
2. f. Derecho, razón, equidad.
3. f. Conjunto de todas las virtudes, por el que es bueno quien las tiene.
4. f. Aquello que debe hacerse según derecho o razón. Pido justicia.
5. f. Pena o castigo público.
6. f. Poder judicial.
7. f. Rel. Atributo de Dios por el cual ordena todas las cosas en número, peso o medida. Ordinariamente se entiende por la divina disposición con que castiga o premia, según merece cada uno.
8. f. desus. Ministro o tribunal que ejerce justicia.
9. f. coloq. desus. Castigo de muerte. En este mes ha habido dos justicias.
10. f. ant. alguacil (‖ oficial inferior de justicia).


Ni...

razón

(Del
lat. ratĭo, -ōnis).
1. f. Facultad de discurrir.
2. f. Acto de discurrir el entendimiento.
3. f. Palabras o frases con que se expresa el discurso.
4. f. Argumento o demostración que se aduce en apoyo de algo.
5. f. motivo (‖ causa).
6. f. Orden y método en algo.
7. f. Justicia, rectitud en las operaciones, o derecho para ejecutarlas.
8. f. Equidad en las compras y ventas. Ponerse en la razón
9. f. Cuenta, relación, cómputo. Cuenta y razón A razón de tanto
10. f. coloq. Recado, mensaje, aviso.
11. f. Mat. Cociente de dos números o, en general, de dos cantidades comparables entre sí.







domingo, 1 de marzo de 2009

¿Cuándo empezará a ser más fácil?
¿Cuándo dejará de doler?

sábado, 28 de febrero de 2009

Insomnio

Qué difícil se me hace todo. En cada paso intentar no reandar lo caminado. Qué locura. Tratar de colocar mis pies en las huellas que dejamos del pasado. Qué mal suena: "pasado"...se me hace un mundo en cada letra. Pensé que sería más fácil, ¿sabes? Cada día haciéndome más fuerte, o aún creyéndolo, para que mi cabeza pudiera mandarle un mensaje a mi corazón. No hace caso. Hoy me sorprendí buscándote en cada esquina. Me pareció verte, en una sonrisa, en un gesto, en una palabra, en un susurro o tal vez en un grito. Yo no estoy para esto. Correr no sirve de nada. No sirve tampoco alejarse. ¿Alejarse de qué? Porque la pregunta para mi no es de quién. Aunque si tuviera que contestarla sería de mi misma. Ya ves. Qué desastre. Intentar alejarme de mi misma, de mi corazón, de mis sentimientos...echar cubitos de hielo en mi carácter, apagar el fuego de mis labios sonrientes. Qué triste. Buscar tu calor entre la gente. Qué miedo. No encontrarlo. No encontrarte. No encontrarme...



Llevo unos días dándole vueltas.
¿Cuánto vive aproximadamente una persona? ¿80 años? ¿90 años?
¿Y qué significa uno tan sólo del camino?

Muchos pueden sacar estadística, probabilidades, hacer teoremas y teorías cuánticas, físicas y metafísicas. Podría hacer una teoría de juegos sobre el tema (la semana pasada empecé a leer un libro de iniciación).

Un año, 12 meses, 52 semanas, 365 días (cuando no uno más, tampoco hay q ponerse , quisquillosos), 8 765 horas, 525 948 minutos y 31 556 925 segundos. Ni más ni menos. Una insignificante porción de nuestra existencia. Para algunos. Para otros, quizás es toda la vida. La razón por la que creen sentirse completos. El motivo por el que cada mañana sonríen al despertar.

lunes, 23 de febrero de 2009

Hope

A veces tengo ganas. Simplemente de sumergirme. De sumergirme en ti. Unas ganas irrefrenables. Locas. Irracionales. De desgarrarte la ropa y de que tú me desgarres la piel con tus besos. Tus besos en mis besos. Y sentirte cada vez más mio. Un poquito más.

A veces es un decir, porque a veces es cuando no tengo ganas.

No tengo ganas de que te quedes inmóvil, de que tus ojos pasen simplemente a través de los mios y no veas cómo mi alma aún late por ti. No. No tengo ganas. De que llegue el día de no poder hablar de nosotros. Y borrar el diccionario que fuimos construyendo con esmero. No.

Siempre. Continuamente, vienes a mi. Día a día. Llenando mis huecos. Cubriendo mi espalda con dibujos invisibles. Pintando mi cuerpo con tu aroma. Vienes a mi, porque yo no soy capaz de irme de ti. Nunca. Descubrirte en la cama y cubrirte con mis piernas, y hacerte cosquillas con mi sonrisa. Y que no se borre la tuya.

Sueños. Eternos. Contigo. Nosotros. Juntos.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Grandes esperanzas

¿Sabes qué es esto?
...

Es mi corazón
...

y está roto
...

¿Lo notas?

viernes, 13 de febrero de 2009

Keep breathing...instead...it hurts so bad

Ramos de flores, bombones, velas que escriben mensajes en el suelo de una habitación vacía iluminando dos cuerpos a oscuras (y sus almas), un baño con pétalos de rosas, una cena para dos, música minuciosamente elegida para una noche especial, dibujos con estrellas, videos y fotos de (nuestros) recuerdos de ayer, un cuento de amor, lencería nueva, un poema, una carta que llega por sorpresa, un detalle de algo que dijiste hace mucho tiempo (y pensabas que no te escuchaba), entradas para el teatro, unas sábanas con palabras de amor, un juego a lo largo de todo el día (y un tesoro al final), una reserva de hotel, champagne y fresas en la cama, un viaje por sorpresa, un picnic a la luz de la luna en la playa...

Hay 365 días en un año para hacer todas estas cosas (y todas las que se nos ocurran), ¿por qué esperamos concentrarlas todas en un único día? La magia del amor no se revive una vez al año, la llama hay que mantenerla día a día, avivarla, cuidarla, resguardarla del viento y del frío, mimarla, cantarle y hablarle con cariño, no desesperar cuando creas que va a apagarse...




**Aún así, hoy, como cada noche en la cama, sigo sintiendo frío y dejando inexplicablemente un hueco en mi espalda**

Please...Hug Me!!

Intentando controlar mi sistema nervioso simpático

viernes, 6 de febrero de 2009

Friday Night

Viernes noche. ¿Qué se hace una noche de viernes?

Llegué hace un rato a casa después de un largo día de clase y mis dos primeros exámenes del máster. Tanto tiempo sin haber dado uso a mis neuronas pasa factura. Estoy agotada. Aún danzan artículos y legislación urbanística-edificatoria por mi cabeza.

Esta mañana al levantarme y abrir la ventana me sorprendió el tejado blanco de casa; color que me acompañó durante el trayecto a la universidad y la vuelta nuevamente a mi tejado. Hace mucho frío, tanto que se me congelan los deditos mientras escribo, y eso que no he dejado de abrazar al radiador desde que entré en mi habitación.

He cambiado las copas por el frenadol y los kleenex y la letra de la música de la discoteca por la legislación laboral y de seguridad social. ¿Un buen plan? Sí, es viernes, choca el sonido de las risas y el hielo en cada una de las manos conocidas de los bares que frecuento, pero hoy no me apetece salir, prefiero quedarme en casa.

En cuanto deje de escribir esto seguiré tecleando, buscando artículos, doctrina y jurisprudencia. Escuchando jazz o quizás algo de música clásica. Hasta que me pesen tanto los ojos que se hayan ganado su descanso.

¿Qué me gustaría en este momento? Una taza calentita de té y un besito dulce en los labios.

El silbido de la tetera que he puesto a calentar hace unos minutos me llama, me queda una noche larga de trabajo, pero sonrío porque hoy, aunque sin beso, puedo sentirme realizada.

Quién sabe qué podrá pasar mañana...

Buenas noches.

miércoles, 28 de enero de 2009

I´m sorry

...No más daños colaterales...

viernes, 23 de enero de 2009

Stop the fight!

Haciendo caso a mi querido amigo Phoenix, y a mi yo interno que grita en silencio en esta continua batalla que mantengo durante tantas noches, he tirado mi espada, mi escudo, mi armadura...todo está enterrado. Armisticio. He firmado la paz. En mi búsqueda he encontrado fuerzas renovadas, energías reforzadas.

Enriqueciendo mi alma sin esperar a que nadie me traiga flores.

Ya no quiero ahogar pensamientos, ni buscar esperanzas en un vaso vacío; no quiero silenciar mi mente, anestesiarla hasta caer tendida en la cama. Gastar mis botas de tanto bailar en un océano de ruido, humo y gente desconocida.

Quiero escuchar cómo llegan las olas a la orilla, esperarlas en silencio sentada en la arena, sintiendo la suave brisa del mar y el cantar de los pájaros. Quiero ver cómo pasan las horas y no paso frío. Y entonces, ver amanecer con una sonrisa en la cara, y tenderme en la toalla a disfrutar de los primeros rayos de sol, calentarme, meterme en el agua y sentir cuan viva soy/estoy.

jueves, 22 de enero de 2009

Luchando contra los demonios que llevo dentro





...Cada día que pasa, más idiota me siento...


miércoles, 21 de enero de 2009

No más días rojos

-Descolgó el teléfono que flotaba en el aire, y se lo llevó a la oreja-.Soy Holly, me dice, hola cariño, le digo yo, estoy en Nueva York, dice ¿qué coño estás haciendo en Nueva York, le digo, si es domingo y mañana mismo tienes la prueba? Estoy en Nueva York, dice ella, porque nunca habia estado en Nueva York. Ya puedes aposentar su culo en un avión, le digo, y volver ahora mismo. No quiero, dice ella. ¿Qué te pasa, niña?, le digo yo. Y ella me dice, para que las cosas salgas bien tienes que querer hacerlas, y yo no quiero. Bien, le digo, qué diablos quieres, y ella me dice, serás el primero en saberlo en cuanto lo averigüe.

**

Pobre desgraciado -dijo, haciéndole cosquillas en la cabeza-, pobre desgraciado que ni siquiera tiene nombre. Es un poco fastidioso eso de que no tenga nombre. Pero no tengo ningún derecho a ponérselo: tendrá que esperar a ser el gato de alguien. Nos encontramos un día junto al río, pero ninguno de los dos le pertenece al otro. Él es independiente, y yo también. No quiero poseer nada hasta que encuentre un lugar en donde yo esté en mi lugar y las cosas estén en el suyo. Todavía no estoy segura de dónde está ese lugar. Pero sé qué aspecto tiene.

**

No se enamore nunca de ninguna criatura salvaje, Mr. Bell -le aconsejó Holly. Esa fue la equivocación de Doc. Siempre llevaba a su casa seres salvajes. Halcones con el ala rota. Otra vez trajo un lince rojo con una pata fracturada. Pero no hay que entregarle el corazón a los seres salvajes: cuanto más se lo entregas, más fuertes se hacen. Hasta que se sienten lo suficientemente fuertes para huir al bosque. O subirse volando a un árbol. Y luego a otro árbol más alto. Y luego al cielo. Así terminará usted, Mr. Bell, si se entrega a alguna criatura salvaje. Terminará con la mirada fija en el cielo.

**Truman Capote**

sábado, 17 de enero de 2009

Llega un momento que de tanto doler ya no sientes nada.

lunes, 12 de enero de 2009

Otro día más

Luchando incansablemente para conseguir controlar mis pensamientos; hiriéndome continuamente con las imágenes que se cuelan cuando bajo mis defensas. Tratando de ganarle este pulso al tiempo. Agotada.



**Cuando parece que todo es perfecto, se derrumba mi mundo**
(nuevamente)

jueves, 8 de enero de 2009

X-mas is gone

La Navidad se ha ido, y en mi caso es como si nunca hubiera llegado. No sé si ha pasado por mi o simplemente he sobrevivido su paso, como los últimos años.

Recuerdo el ritual de todos los años, cuando un mes antes ya estábamos los cuatro deseando abrir el altillo y sacar las cajas con los adornos, el árbol y el portal. Esas cajas olían aún a magia, la magia que cuando éramos pequeños y esperábamos impacientes la llegada de Papa Noël, la cabalgata y los Reyes magos. Ir a buscar la escalera y abrir el armario era la primera señal de que la Navidad se estaba acercando; ya nos habíamos preocupado de tener listas nuestras cartas. Aquellas pesadas cajas que se iban multiplicando con los años y que han llenado muchas páginas de nuestro álbum de recuerdos.

Primero hacíamos al árbol, colocábamos todas las ramas que se habían desprendido; luego las luces, para pasar finalmente a los adornos, ¿cuáles tocan este año? Aún puedo oler las manzanas rojas que colgábamos del árbol, desde la más grande a la más pequeña, puestas por unas manitas muy chiquititas y torpes, las nuestras, para luego ser reubicadas con más sentido y gracia por nuestra madre. Nos dejaba hacer el árbol como queríamos, pero luego lo cambiaba todo.

Era fantástico ver todo el suelo del salón cubierto de bolas de navidad, de lazos, de casitas, de estrellitas y angelitos, el viejo papa noel y su trineo...Qué recuerdos.

Luego hacíamos el portal de Belén, uno muy antiguo (era el que mi padre hacía cuando era pequeño) que al principio no me dejaban tocar porque entonces era la más pequeña; y luego pude ayudar a hacer la cascada, las montañas, el río con sus piedritas y papel de plata a imitación del agua, con musgo y arena. Colocar todas las casitas y figuras, entre ellas la del pastorcillo cagón (mi preferida). E ir cada día acercando a los Reyes un pasito más hasta que se encontraban delante del niño, y nos acostábamos nerviosos muy temprano para levantarnos de madrugada y ver lo buenos que habíamos sido durante el año con todos esos regalos. Corriendo por casa. Alucinados.

Ilusión.

Cuando era pequeña me encantaba la Navidad, y no es que los años hayan apagado mi lado infantil y haya dejado de creer en la magia y la fantasía. Pero en casa hace años que no hay Navidad. Ya no hay árbol ni portal de Belén, ya no hay villancicos y panderetas. La ilusión se esfumó hace muchos años, junto con las pesadas cajas y nuestro árbol, con las figuras rotas de los pastorcillos.

Se esfumó porque tú eras la esencia, tú mantenías nuestras mentes en los recuerdos del pasado, reavivando la llama cuando parecía extinguirse. Te echo mucho de menos.


Feliz navidad.

Tu recuerdo vive en mi, no te olvidaré.